sábado, 26 de septiembre de 2009

Pensando...(Drake)

Una semana y media. Una semana y media desde que se fue. Sabía que un día me iba a dar un ataque, no sé si de pánico, del corazón -poco probable- o de algo...
Después de todo el embrollo de la pelea y tal, me dejaron ir al instituto. Desde ayer. Sofí y yo llegamos al instituto como siempre, con sueño. En la clase de física y química, mi compañera todavía no se había rendido en intentar ligarme, pero yo pasaba de ella, como siempre. Mientras que el profesor hablaba, yo me quedé enfrascado en mis pensamientos. Era necesario volver a verla, no podría aguantar mucho más. Desde que Alex y Carla me dijeron que intentaban contactar con ella por el msn o por el móvil, pero sin éxito, me destrozó. Pero lo que más me impactó era que Alex había llamado a la madre de Claire -no sé como consiguieron su número- y ésta les había dicho que Claire sufría depresión. No le apetecía hacer nada, y que cuándo dormía repetía mi nombre una y otra vez... pero sin gritar ni nada. Qué madre más cotilla tiene. Qué puedo hacer... Me despertó de mis pensamientos el profesor.
-Señorito Drake, ¿está atendiendo? ¿Qué acabo de decir? -quizá si saliera de clase... me aclararía las ideas.
-Esto... que... no lo sé. Ni me importa lo más mínimo.
-¡¿Cómo?! ¡Fuera de clase! ¡Y espere hasta que terminemos!
Me encogí de hombros y salí. El profesor cerró la puerta. Bien, había funcionado. Me crucé de brazos y me apoyé en la pared mirando al suelo. Vale, vale, a ver... ¡Ah, llamar a su madre por teléfono! No, que estúpido, seguro que me colgaría al saber quién era... y es que tampoco haría mucho... De repente escuché unas voces que salían del despacho del director. Me acerqué y escuché.
-Si, director. Lo siento, pero tengo que ir allí. Mañana cojo el avión. -dijo una profesora.
-Bueno, está bien. Hasta que vengas, estará una sustituta. Que tenga suerte.
-Gracias. -y salió del despacho.
Al verme me saludó con la mano y se fue a una clase. ¡¡Pues claro!! Esa señora me acaba de dar una idea... aunque seguramente acabará mal, me castiguen como tres o cuatro años y... Bueno, pero como le dije al médico, iría hasta el fin del mundo sólo para complacer a Claire. Y esto va a ser más o menos lo mismo.
Después de clase, cogí un papel y un boli, y fui hacia Carla y Alex, que hablaban entre ellas. No sé dónde estarán los demás, pero mejor, me dará más tiempo. Al verme me saludaron con la mano.
-¡Hola, Drake! ¿Qué tienes ahí? -me preguntó Alex.
-Pues... necesito vuestra ayuda...
-Lo que quieras. -dijo Carla sonriendo, le devolví la sonrisa.
-Pues bien, quiero que me escribáis dónde vive exactamente Claire. Os lo dijo, ¿no? Por si acaso.
-Esto... si, nos lo dijo.
-¿Podéis apuntarlo aquí? -ambas asintieron.
Les di el bolígrafo y Alex escribía con las indicaciones de Carla. Al terminar me lo dieron. Le eché una ojeada y me lo guardé en el bolsillo.
-Muchas gracias, chicas.
-Y... ¿por qué quieres su dirección? -preguntaron ambas al unísono.
-Porque... me voy a Francia.